Esta siendo un verano extraño, como todo lo que viene sucediendo desde que el coronavirus irrumpió trágicamente en nuestras vidas. Un verano sin canción del verano, sin festivales de música, sin la Vuelta, sin los JJOO de Tokio…
Para poner una nota de normalidad y como hago cada año desde que tengo memoria, he disfrutado de unos días de descanso estival en Salamanca, en concreto, en el pequeño pueblo de mi madre, Aldeaseca de Alba.
Una mañana, mientras cotilleaba en los armarios y cajones de la casa, di con una caja de «trastos» pertenecientes sin duda a la anterior propietaria. En parte por sensibilidad, en parte por la tendencia de algunos mayores a guardar y no tirar, mis padres habían optado por salvar la colección de objetos y recuerdos, aunque solo fuera para almacenarla en el fondo oscuro de un armario.
Con esta entrada me propongo hoy sacar a la luz esos objetos feos, raros, imposibles, quizás innecesarios, y brindarles la oportunidad de reivindicar su singularidad. A fin de cuentas, la belleza es a menudo solo una cuestión de perspectiva, de enfoque, de contexto, de momento o de luz.
Typical Spanish? (1) Typical Spanish? (2)
¿Oca o tetera? Ay ho, ay ho… Botijo y tomate MIX ¿En serio…? El mejor amigo La maternidad La senda de los elefantes
Lechuza «trasdiadora» Don’t stop the music Lejos de Asturias «Homo Sapiens» (1) «Homo Sapiens» (2)
Muestras de amor Pavo irreal + SPF 100 Rosa quiere a Eladio Paz en la trinchera
Un chino en Castilla (1) Un chino en Castilla (2)
Pez fuera del agua El teléfono del amor (1) El teléfono del amor (2)
Eran otros tiempos (1) Eran otros tiempos (2)